La mayoría de empresas dedicadas a la instalación de platos de ducha lo hacen sobre medida por lo que cambiar tu bañera por un plato de ducha es muy sencillo simplemente se saca la bañera de su lugar, se alisa el piso, y sobre él se instala el plato.
No necesitas alicatar las paredes, sino cubrir este espacio con otras líneas de plato de ducha que pueden ser en el mismo tono o en otro que combine entre el piso de ducha y la pared.
Hay una gran cantidad de opciones que van desde los tonos negros vino tinto y marrón hasta los blancos más puros por lo que se pueden hacer una infinita cantidad de combinaciones e incluso si lo deseas hacer una prolongación del piso de tu baño imitando su color, lo que le dará una mayor amplitud visual.
Un plato de ducha combinado con unas puertas de vidrio o mamparas Siempre será un acierto en decoración, Las mamparas pueden ser de puertas corredizas o abrirse hacia el exterior de la ducha, todo depende del espacio que esté dispuesto en tu baño para esta sección.
Un plato de ducha te ayudará a economizar una gran cantidad de dinero en agua y calefacción pues tu baño en la mañana será mucho más rápido.
Además, evitar accidentes particularmente para niños personas mayores y de baja movilidad. Sí tienes personas que necesiten un bastón un caminador o una silla de ruedas para desplazarse un plato de ducha les dará mayor seguridad y les permitirá una mejor calidad de vida ya que no necesitarán demasiada ayuda para poder asearse diariamente.
Realmente el material en sí es económico, quizá lo que te pueda aumentar los costos es la dificultad que haya en sacar la tina de su lugar, una vez retirada y verificado que no existan fugas ni humedad sólo requiere alisar el piso e instalar.
Dependiendo de la cantidad de espacio todo el cambio de tu baño puede tener un costo de 50 a 120 €, pero por supuesto depende tanto del metraje como de la terminación y calidad de los materiales.
